El excanciller Álvaro Leyva Durán fue llamado a juicio disciplinario por la Procuraduría, que lo acusa de desobedecer una suspensión provisional mientras se siguen investigando posibles irregularidades en el proceso de licitación de pasaportes.
El ente disciplinario le formuló pliego de cargos y lo llamó a juicio tras concluir que habría desobedecido una suspensión provisional que le impedía ejercer funciones públicas desde el 24 de enero de 2024.
La sanción, con una duración de tres meses, fue impuesta mientras se investigaban presuntas irregularidades en el proceso de licitación del contrato para la impresión de pasaportes, que aún hoy en día sigue generando controversia.
La Procuraduría, en ese entonces, le abrió la investigación disciplinaria luego de que Leyva declarara desierta la licitación cuando se desempeñó como canciller, pese a que ya existía un oferente habilitado y calificado, decisión que fue considerada contraria a los principios de contratación pública.
Aunque la suspensión fue notificada por medios electrónicos y de forma personal, el exministro habría seguido firmando documentos oficiales y desempeñando funciones propias del cargo entre el 24 de enero y el 6 de febrero de 2024. Entre los actos registrados en ese periodo se encuentran notas diplomáticas, certificaciones, solicitudes de presupuesto para futuras vigencias y varias resoluciones ministeriales.
Para la Procuraduría, el presunto incumplimiento de la suspensión no solo desconoce una orden legal de autoridad competente, sino que afecta el respeto por el orden institucional y la función pública. Por ello la falta que se le investiga podría estar en el rango de titulo de dolo, lo que le impondría una severa suspensión.