Algo ha ocurrido que aún los politólogos de la región no han establecido con certeza porqué en esta oportunidad hay tantos candidatos inscritos a la alcaldía de Valledupar. 11 en total. El ejercicio en plena democracia es importante y sano, si cada uno de ellos tiene aspiraciones serias para trabajar su campaña y llegar hasta el final. Hay que estar pendiente que algunos de ellos no terminen en comodines y renunciando en el camino para adherirse a otra campaña vendiendo su poca y famélica votación
Los perfiles y vocación de triunfo de cada uno son los siguientes:
- Ernesto Orozco. Exdirector general de Comfacesar. Sacó a la empresa de una quiebra al llegar y la convirtió en una de las Cajas de Compensación más prospera y fuerte del país. Demostró capacidad ejecutiva. Inexplicablemente perdió ante el Mello Castro en las pasadas elecciones por 2 mil 700 votos. Hoy es el más fuerte y tiene la primera opción de ser el próximo alcalde. Es vallenato puro y tiene experiencia administrativa
- Cristian José Moreno. Hermano del exgobernador, Cristina Moreno Paneso. Exrepresentante a la Cámara, la votación no le alcanzó para continuar allí. Es joven, serio y trabajador. No se le conoce experiencia administrativa, pero cuenta con buena aceptación y su aspiración tiene vocación de triunfo
- Jaime González. Joven y figura fresca. Se le acusa de ser el candidato del actual alcalde lo que lo podría perjudicar. Su inscripción estuvo rodeada de incertidumbre, incluso, circuló la noticia que daba cuenta de su retiro, pero al final de la tarde se inscribió. Esa situación dejó un mal sabor y precedente
- Miguel Morales. Una vez más se lanza. Tiene poca o nula vocación de triunfo su aspiración, no tiene experiencia
- Camilo Quiroz. Hijo de un conocido y de muy buenas maneras en Valledupar, Dikson Quiroz Torres. Tiene academia y a través de sus escritos ha demostrado buenas ideas, innovadora y ejecutables. Si la dinámica no da un giro a su favor, podría tener buen futuro para las próximas elecciones
- Álvaro Portilla. Intenta por segunda vez. Es un prestigioso profesional de la medicina, empresario y una carta importante para tenerlo en cuenta, serio, preparado, pero no se le conoce o reconoce un trabajo político que le permita soñar con un triunfo inmediato. Su éxito dependerá de su capacidad de forjar un liderazgo traducido en un fuerte golpe de opinión
- Ricardo Reyes. Heredero de un exitoso empresario dueño de la cadena de supermercados Mi Futuro. Vocación de triunfo no tiene y se espera de él que no se convierta en comodín y comience a construir un futuro para próximas oportunidades
- Ricardo Vives. Se desempeñó como un excelente concejal. Tiene criterio, carácter y conocimientos sobre los problemas del municipio. No cuenta con una plataforma política que le garantice posibilidades de éxito, pero su devenir histórico es prometedor
- Darling Guevara. Cuenta en su hoja de vida con un frustrante paso por la rectoría de la UPC, en donde un fallo judicial la sacó del cargo. Logró una buena gestión y visibilización como Jefe de Gestión social de la alcaldía. Llegar a la alcaldía seria todo un milagro atribuido a la Virgen del Carmen
- Lina de Armas. Ha tenido burocracia como secretaria de salud de la alcaldía de Valledupar. Lleva a cuestas el riesgo de lanzarse sin tener un mínimo apoyo político y popular. Dudamos que termine su campaña y terminará uniéndose a otro candidato
- María Isabel Campo. Su mayor capital político es ser hija de quien ha sido el mejor alcalde que ha tenido Valledupar en toda su historia, Rodolfo Campo Soto. Debe refrendar ese estatus con un buen liderazgo y demostrar capacidad propia. Si lo logra no cabe duda que será una buena alcaldesa. Deberá estar prendida a todo momento del Santo bendito del Valle
En próxima entrega publicaremos el perfil ampliado y las propuestas de cada candidato