El célebre y reconocido caricaturista, julio Cesar González, conocido con el seudónimo de “Matador”, fue despedido sin explicaciones y sin atenuantes del diario El Tiempo, después de haber permanecido allí durante 15 años. En la actualidad hace parte del equipo periodístico de la cadena radial, Caracol. Se presume, según algunos críticos y políticos, que su salida se debió a su postura sesgada frente a acontecimientos políticos que se dieron en el país en el pasado reciente en contra de los expresidentes, Álvaro Uribe Vélez, e Iván Duque. A este último lo caricaturizó de manera permanente y con extrema fijación, relacionando su cara con la de un cerdo.
Entra en discusión el tema de la objetividad periodística, y particularmente, la caricatura como expresión creativa. Lo cierto es que su tendencia hacia la izquierda, a la cual tiene derecho, se logra fácilmente interpretar en sus trazos desbalanceados. Sin embargo, el periódico se reserva el motivo del despido y todo queda a la libre interpretación.
Para empeorar la situación, el abogado del expresidente, Uribe, Abelardo de la Espriella, publicó un trino en donde revela un caso de violencia intrafamiliar por parte de Matador en contra de su esposa, Alejandra María Valencia, propinándole una golpiza hace diez años en la ciudad de Pereira, Hecho aceptado y reconocido por el imputado.